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viernes, 18 de diciembre de 2015

LO IMPORTANTE ES EL CAMINO (Maratón de Sevilla 2016)

Hola amigos,

Voy a relatar en unas líneas, como llevo mi camino al reto planificado para la primera parte del curso escolar.

 ANTECEDENTES.

Tras mi preparación, competición y supervivencia en el Triatlón de Alcalá. Este verano me fue entrando "ganeta" de enfrentarme de nuevo al Maratón. Tras las vacaciones y con una evidente pérdida de forma,- aunque menos que en los últimos años,- esta idea se fue acentuando.

Así pues durante el mes de Septiembre seguí saliendo con la bici, para fortalecer aquellos grupos musculares que poco se trabajan con la carrera a pie, y saliendo a correr de vez en cuando. Tras correr la Carrera popular de Chinchilla a ritmo muy cómodo, me decidí a apuntarme, pero iban a surgir los...

...PRIMEROS IMPREVISTOS.

Tras la carrera de Chinchilla, durante un trote mañanero sentí un pinchazo en el gemelo, volví cojeando y tras una semana parado volví a salir a correr, pero tras un rato corriendo las molestias volvieron a aparecer y esta vez más acusadas.
Recurrí a la fisioterapia, masaje fuerte en los gemelos que se me saltaron las lágrimas y no precisamente de emoción y... más cojo todavía. Visita al médico que me dice que lo normal es que tenga rotura fibrilar. Tras ecografía y reposo de varios días me confirman que no tengo rotura, por lo que me planteo salir a correr durante un par de semanas, cada día con más intensidad y si para el 15 de noviembre no tengo molestias, me apunto a Sevilla y empiezo el entreno específico, CON DOS COJONES Y UN PALITO.

Así pues, me apunto y ya veremos si aguantan mis patas.

EL ENTRENO

Aviso a los técnicos que os vais a echar las manos a la cabeza. Mi plan de entreno se intenta adaptar a mi vida, a mi cuerpo escombro y a mi situación, por lo que tiene multitud de errores que los que sabéis de esto vais a encontrar rápidamente, faltan ejercicios de fuerza, falta más fondo, sobran kilos del corredor, los ritmos van un poco a su aire, etc.
Hay va una captura de pantalla de mi plan:
A la izquierda las semanas, y a la derecha los kms semanales aproximados.


PRIMERAS CINCO SEMANAS.

 Si habéis llegado hasta aquí, habréis observado que estamos en la quinta semana, ¿Cómo ha ido hasta ahora?. Puedo decir que bien, no me duele nada excesivamente y no me he lesionado. Las sensaciones, por días. Hoy he hecho el rodaje más largo hasta ahora, 20 kms, y he acabado un poco más rápido que el ritmo óptimo de maratón los últimos 6 kms, aunque un poco machacado.
¿A qué le llamo ritmo óptimo? Pues el ritmo ideal suponiendo que todas las circunstancias del entreno y el día de la prueba fueran ideales, en mi caso entre 5,05 y 5,10 m/km.
Aquí va un resumen de lo hecho hasta ahora.
El plan específico empieza el 16 de noviembre.

CONCLUSIÓN

Por qué lo importante es el camino? La respuesta es clara. En mi situación actual, lejos de ser un atleta profesional, o incluso un atleta, sino un hombrecillo que sale a correr a las 6 de la mañana por Albacete, antes de que pongan las calles. Hay multitud de causas que me pueden romper el plan, unas propias del entrenamiento, como por ejemplo lesiones, y otras ajenas, pero más importantes, causas familiares o incluso laborales. Si todo se fastidia, no puede ser una frustración, ya que lo importante es el camino recorrido, el maratón es la guinda final, pero la tarta son los madrugones de las 6 de la mañana.

Como premio al que se haya tragado el ladrillo os dejo con un vídeo que me gustó mucho. Este si que es de un atleta de verdad.


Abrazos.

domingo, 21 de junio de 2015

LO IMPORTANTE ES EL CAMINO (Triatlón de Alcalá del Jucar)

Ahora que tengo un rato voy a escribir mis impresiones de las últimas carreras en las que me he embarcado.

Ya el año pasado me quedé con ganas de participar en el Triatlon de Alcalá, pero diversas circunstancias me quitaron la idea. Por lo que este año es algo que tenía en mente desde el mes de septiembre.

Pero como a todos, la vida nos tiene preparadas diversas sorpresas que hicieron que el invierno no fuera muy prolífico en entrenamientos, únicamente mis escapadas a la piscina semanales y alguna salida a correr de vez en cuando.

Así fue pasando el invierno y nos plantamos en primavera. El triatlón no sé si lo haría, pero la media de Albacete era el 7 de junio y como no me pusiera en marcha la tenía que hacer "rulando". Así pues, sacando tiempo de donde no lo había me fui aumentando los días que me escapaba un rato a correr. Todo combinado con mis escapadas a la piscina, que me está creando cierta adicción.

A finales de marzo, aprovechando una oferta, me regalé por el día del padre un cacharrito que aumentó la motivación. Garmin 910xt, juguetico que te da datos de lo más diverso. En ese momento decidí que me apuntaba al triatlón, ya vería como combinaba el entrenamiento de la media y del tri, pero como digo en el título lo importante es el camino hasta el 20 de junio en Alcalá con parada en la media de Albacete.

Los último días de entreno antes del Tri según el Garmin
Poco a poco fui sacando ratejos para salir en bici que la tenía desde el verano sin moverla. Las salidas en bici no han sido muchas ni muy alentadoras. Como ejemplo sirva esta anécdota, poco antes del Tri volviendo de las Peñas to flipao y disfrazado de triatleta me adelantó un tipo en bici de montaña.

Así me planté en la Media de Albacete, esta carrera nunca falla, 15 años corriéndola, y salvo causa de fuerza mayor se corre, que no todos los días te dejan correr sin coches por el centro de Albacete, buenas sensaciones y seguridad de que en el Triatlon en el tramo de carrera a pie, me iba a merendar a varios competidores ¡¡¡Qué equivocado que estaba!!!

Jesús y un servidor, marcando tipo, muy propio de los atletas de este club
Dos últimas semanas de entrenamiento, echando de menos no haber sacado una tarde para hacer recorridos con desnivel en bici, ya que el tramo ciclista de Alcalá tiene guasa, y como subiendo no voy bien y bajando no se ir....

Sábado, 20, cuatro de la tarde, 34ºC de temperatura, viento calentorro del Este. ¡¡¡Cojonudo!!! las condiciones ideales. Pienso en que por lo menos el agua del río estará calentica y no hará falta el neopreno, porque yo tardo del orden de 15 minutos en quitármelo con peligro de hacerme un esguince cervical.

Ambiente muy chulo, pero la verdad es que las bicis de 5000 € y los cuerpos Danone que veo por todos los lados asustan, cada vez que me cruzo con tipos más finos que un palillo y con más músculos que Rambo en sus buenos tiempos, disimulo y meto barriga, pero la cara de lástima con la que me mira Reyes lo dice todo. Y sí, efectivamente lo pienso, ¡¡¡dónde coño me he metido!!!

Siguiente noticia, neopreno opcional, pero todo el mundo me avisa que si lo tengo me lo ponga, el agua está fría de pelotas. Voy con dos amigos que se lo van a poner sí o sí, como uno es casi novato en estas cosas hago lo que le dicen los más veteranos. Los 5 minutos que estoy con el neopreno puesto creo morir, me tiro al agua, que efectivamente está fresca, ya que el calor era insoportable.

Pienso que menos mal que he bebido todo lo que me caía, porque sino me iba a deshidratar. Aunque dos horas después me dí cuenta que a pesar de todo también me deshidrataría.

Antes de irme a la T1, con cara de susto.


 Empieza la carrera, empiezo a nadar y antes de dar dos brazadas se me echa un tio encima y me hunde, saco la cabeza, y me arrean una patada en la boca. Joder si no he empezado y se han puesto todos de acuerdo en darme de leches. Tras unos pocos porrazos más, llego a la boya para hacer el primer giro y parece que ya nado más tranquilo, en ese momento se me cruza un tipo y me mete tal guantazo que se me van las gafas a tomar viento, las cazo al vuelo y tengo que parar un momento a ponérmelas. La vuelta a pesar de que es con la corriente de cara la hago mejor ya que no tengo tanta gente cerca para darme de leches.

Llego a la transición, miro el reloj, 22:30, para los porrazos que me han dado no está mal del todo, salgo por atrás, pero quedan todavía unas 50 bicis. Ahora a quitarse el neopreno, como esperaba se me engancha por varios sitios y estoy casi más tiempo en la transición que nadando.

Por fin salgo con la bici, y a pedalear, sin duda el segmento al que le tengo más respeto, en Santa Pola, el año pasado fue un verdadero desastre. Aquí además es infinitamente más duro. Me pasan algunos en los primeros kilómetros pero prefiero ir cogiendo ritmo poco a poco.
Saludando a la afición.
Me estabilizo y me planto en la subida de la Recueja, desde abajo veo hasta donde hay que subir y "se me hace el culo agua". Sorprendentemente, subiendo a ritmo voy cogiendo a gente que va fundida y arriba pillo a uno con el que nos ponemos a dar relevos y vamos pasando a un montón de grupos. Este tramo también es muy duro. Un falso llano para arriba con el viento de cara, pero en el que gano muchas posiciones. La verdad es que voy un tanto emocionado, pienso que cuando lleguemos al final del falso llano casi todo lo que queda es para abajo y ya está todo casi hecho.

Llegamos al cruce de Villavaliente y para abajo, en un par de curvas se me va mi compañero y me quedo solo. El final de la bajada lo hago con prudencia que quiero llegar entero y me pasan cuatro o cinco corredores.

Llego a la T2, dejo la bici y salgo dispuesto a comerme el mundo en la carrera a pie, cuando llevo 500 metros veo que nos meten por las calles del pueblo con sus hermosas cuestas. Cualquiera que conozca Alcalá, sabe lo que hay. El caso es que el mundo me come a mí.

Desde los últimos kilómetros de bici iba con ciertas molestias de estómago, que en las cuestas de la carrera a pie se me reproducen y además me viene un bajón como hacía tiempo que no tenía. Así pues me tomo la carrera a pie como 7 km para sobrevivir a ritmos cercanos a los 6 minutos/km. Me pasa bastante gente pero no estoy para nada.

Finalmente entro en meta, con sed y con el estómago revuelto, un par de visitas al Señor Roca y mucha agua y recuperado hasta la próxima.

Con mis amigos Miguel y Ricardo en meta. No tenía ni fuerzas para esconder la panza.
Pinchando aquí el enlace a los datos del Garmin.

 CONCLUSIONES:

  • He disfrutado, pero también he sufrido en la carrera a pie como no recordaba.
  • Tengo que entrenar eso de quitarse el neopreno.
  • A pesar de beber mucho antes de salir y durante la prueba creo que llegué con cierto grado de deshidratación, además llegó un momento que no asimilaba el líquido que tomaba y se me descompuso el estómago, no se que hay que hacer para esto, a parte de no hacer el bruto con tanto calor.
  •  No deja de sorprenderme la cantidad de gente que práctica este deporte, con el tiempo que exige su preparación. Es muy entretenido y prácticas tres modalidades que se complementan, pero exige mucho tiempo. 
  • Y no hablar de la gente que se prepara Ironman y demás barbaridades, quizá se le está perdiendo un poco el respeto a estas cosas.
  • La prueba está muy bien organizada, y es muy bonita. El circuito ciclista es duro y bonito. La zona de natación está bastante bien.
  • En mi opinión el tramo de carrera a pie es duro demás. Aunque quizá yo llegué tostado del tramo de bicicleta.
  • Si el año que viene os apuntáis más chinguanes hacemos una expedición a Alcalá todos.
Esto es todo. Ahora a descansar unos días.

Miguel Ángel.


sábado, 2 de mayo de 2015

Mi primer maratón

Querido Chinguanes, ha pasado una semana ya desde mi debut en Maratón. La distancia reina que siempre ha permanecido en la cabeza, que aguardaba ser asaltada cualquier día, cualquier año, para poder ser un Runner completo.




Una maratón es un pequeño mundo, reunido en un lugar y un día. Es una suma de matices, de colores, de sensaciones repartidas a lo largo de cada una de las 31000 almas que el domingo perseguían cumplir el más ansiado de sus sueños.


Como todas las grandes gestas, no era cosa de un día ni podía ser cosa de uno sólo. Siempre hay que tener un guía, un bastón en el que apoyarte, un reflejo en el que mirarte. Muchas tiradas largas, muchos entrenos a diferentes horas y muchos kilómetros y kilómetros.



Ha habido muchos momentos que compartir, muchos chinguanes me han acompañado para llegar hasta aquí. Pero sí había un Chinguan con el que compartir este momento, ese era el gran Juan Ángel. Ahí estábamos, no era el mejor sitio, no era el mejor maratón, ni era el mejor día...pero la épica se escribe con sudor, sangre y lágrimas.


Más amigos me han acompañado en esta aventura que ya pusimos fecha hace unos meses. Aquí, solo en Madrid, había que buscar algún runner con el que los kilómetros fuesen más llevaderos. Así, Marta y sus consejos, Tomás y su fuerza de voluntad, y Sebas y su experiencia han marcado la preparación de esta maratón.


El tiempo es lo de menos, de las 31000 personas que salieron conmigo de la plaza de Cibeles, yo era mi único rival, el único a batir y a la vez el único que me acompañaría durante toda la carrera como liebre y como lastre.

La carrera paso como una tirada larga, es como sí todos los deberes bien hechos te llevan a aprobar un examen de manera comoda. Hasta el km 27 todo paso como una tirada más, fue como ir en una nube, todo me sorprendió, me encontré muy bien y lleve el ritmo planeado como un reloj suizo.
Tuve mucha compañía durante la carrera, pero la más especial fue los últimos 10 km con un compañero de entrenos que término conmigo la prueba, ya había corrido la de Sevilla y sus últimos consejos en la parte final fueron claves.

 Al final, la maratón, la épica, la gesta queda como una muesca más en la la culata deportiva. He de decir que me sorprendí a mi mismo, todas las dudas anteriores quedaron disipadas gracias a la confianza en uno mismo y en el trabajo bien hecho. Tal vez la mayor sorpresa fue que la prueba y la distancia, duras por sí mismas, no me resultaron tanto. Me encontré muy bien y disfrute de ello y con ello. Tras consultar las estadísticas, parece ser que hay más mito en esto del maratón que de realidad, más de 1800 atletas supere en 42km, la gente corre por muchos motivos, pero también hay muchos motivos por lo que la gente no debería correr. Lío en los cajones, gente que se para y nada desde casi el principio y lo hace por el centro de las
Calles...no se, viví lo bueno y lo malo, disfrute y llore como un niño al cruzar la meta...todo en uno. Un maratón es un mundo en todos los sentidos!!!

¡¡Feliz, un paso más, otra a la saca...hay que tener cuidado con lo que se sueña, porque a veces, los sueños se hacen realidad!!!



Aquí queda la leyenda, una batalla más lograda, sentando los principios de un nuevo reto por imaginar, un nuevo sueño que tal vez al dormir se haga mañana realidad.

Os dejo el vídeo que Juan Ángel y yo fuimos viendo de camino a la salida. No he dejado de verlo durante el invierno, antes de las largas tiradas sólo algunos domingos, todo lo que dice es real...


..."Para poder realizar cualquier gran gesta, siempre hay que dar un primer paso..."
 Ánimo Chinguanes.

miércoles, 29 de abril de 2015

MARATÓN DE MADRID 2015

Decía el gran Emil Zatopek que "Si quieres correr, corre una milla. Si quieres experimentar una vida diferente, corre una maratón". Igual esto esto suena demasiado grandilocuente y correr un maratón no te cambia la vida, pero lo que si te cambia es tu vida como corredor, porque todos los que somos apasionados de este deporte miramos al maratón como EL RETO con mayúsculas.

Así que buscando ese reto, hace más o menos 4 meses, yo y otro Chinguan y AMIGO (eso también con mayúsculas), nos embarcamos en esta aventura que es prepararse una maratón. Bueno, realmente la idea venía de antes, pero la falta de tiempo para entrenar, lesiones, compromisos, etc...nos hicieron abandonar la idea tanto de Valencia, como de Sevilla.

Y se presentó Madrid, con su recorrido de subidas y bajadas (de los peores recorridos para debutar), con su día de perros (no podía llover más)..., pero ya no había excusas, habíamos entrenado, estábamos preparados y esta vez nada ni nadie nos iba a echar atrás.

Toca levantarse a las 6:15, desayuno fuerte con el estómago cerrado por los nervios, primeras visitas al baño (no serán ni una, ni dos, ni tres....) y para el centro.





Tras las correspondientes fotos de rigor, echarnos unas risas (memorables los momentos bolsa de basura para no perder calor "modelo palabra de honor" y el señor ligero de estomago evacuando en mitad de un parque con toda la gente viéndolo "modelo caganet runner"), tras ir al baño otras 4 o 5 veces (no estábamos nerviosos apenas que va!) y tras comprobar que todo estaba en su sitio (geles, vaselina, pulsómetro,...) abrazo de los que se recuerdan con los años y cada uno para su cajón de salida.

Una vez solo, rodeado de de 31.000 corredores y justo antes de salir, piensas en todo lo que has entrenado para llegar hasta aquí...y por fin, la salida...allá vamos!!!

Primer kilómetro a evitar caerse y a coger ritmo...la idea era 4:40-4:30 pero las piernas y sobre todo el corazón, me piden más...se que es un error, se que lo más importante del primer maratón es ir al ritmo previsto y no "fliparse" que luego lo puedes pagar...pero no lo pude evitar, tener las calles de Madrid cerradas para ti, con todo el mundo animando, con los conciertos durante el recorrido, al final me hicieron ir más rápido de lo que debía.


Uno de los momento que recordaré para siempre es la bajada por la calle preciados, con la Puerta de Sol que vemos todos los finales de año al fondo, llegando al centro de Madrid y de España, con miles de persona gritando,....ufff hay que ser de hielo para que no se te pongan los pelos de punta.

Pero no todo iba a ser bueno, los kilómetros pasan la lluvia arrecia y ese ritmo alto inicial empieza a pasar factura (por algo hay que hacer caso a las recomendaciones). Ese ritmo que llevaba al principio es casi imposible mantenerlo, la subida a Atocha se hace eterna, las piernas parecen dos estacas de madera y la cabeza empieza a flaquear...y para muestra de ese sufrimiento una imagen vale más que mil palabras.

En estos momentos solo hay que pensar 2 cosas: no pares, corre, no pares, corre, no pares, corre...y los kilómetros van cayendo y  ves la meta del retiro cada vez más cerca y ahora si que si, esto ya no te lo quita nadie.

La entrada en meta, ¿cómo se puede explicar?...es una mezcla de querer reír, querer llorar (de emoción y de dolor), querer gritar y abrazarte con todo el mundo,...es un subidón!!!


Al final 3:02:59 (3:02:25 reales), mucho mejor de lo que yo tenía pensado...aunque realmente el tiempo es lo de menos y lo mejor es la satisfacción de acabar, ser un FINISHER DE MARATON (por cierto soy el de rosa del fondo de la foto, jeje).


Ahora, con las piernas aún doloridas (...y lo que te rondaré morena) me queda un bonito recuerdo no solo del antes y el durante, sino también del después, ...del beso de mi mujer, de las felicitaciones de Lola (la novia de Edu) y de la carica y la mirada de Edu al llegar (teníais que verlo).


Gracias Chinguanes por hacerme participe de esta locura de correr y nos vemos por los caminos, calles, carreteras, parques....

TAL VEZ LO QUE TE HACE GRANDE,
NO ENTIENDA DE COMO Y POR QUÉ.
TAL VEZ LO QUE ME HACE GRANDE,
ES TENERTE DELANTE OTRA VEZ.

PD: me ha quedado muy épico y emotivo, pero es lo que hay jejeje.

miércoles, 15 de abril de 2015

"Pataliebre"


Como bien nos recuerdan esos antropólogos de La Mancha Este que parieron “La Hora Chanante”, el término “pataliebre” aparte de ser la esencia de un cordial saludo lugareño (¿Qué hay, pataliebre?) define por igual a aquel ciudadano o ciudadana de pierna inquieta. Sean andarines o corredores, son los que se adelantan a sus hijos o parejas cuando andan por la calle. Aquellos que arrastran incluso al perro porque va más lento. Los que no relajan su marcha ni en vacaciones. Los que levantan baldosas a su paso, ágil y veloz, sin titubear. Aquellos a quienes sus amigos o cuñados abroncan, desde el ahogo, por andar deprisa en el agradable y matinal paseo de los domingos. Los genuinos pataliebres no son de freno fácil. Si van al pueblo les dicen de Madrid por lo rápido que andan. Y en la ciudad se desquitan, serpenteando la Gran Vía en un santiamén.
En el trabajo son nerviosos pero alegres. Se justifican con fobia al ascensor y a los sitios cerrados para que les dejen subir y bajar las escaleras a su gusto, que suele ser como mínimo de dos en dos peldaños. Y nadie puede seguirles cuando hay que subir a un sexto. Por lo que nunca nadie les ha podido sentir tan de cerca como para certificar los múltiples rumores de locura vigoréxica que, sobre ellos, circulan por toda la oficina.
Volverían a su casa andando, tras la jornada laboral, si el sudor no carcomiera sus caros trajes de marca. Pero como compensan su sentimiento de culpabilidad haciendo de cualquier momento diario un pequeño entrenamiento, ya en el metro, rechazan las escaleras metálicas para subir andando con aire aristocrático las dobles y triples rampas de algunas estaciones, sabiéndose observados con supuesta envidia por los muchos espectadores que les contemplan a diario. Más que chulería es la cruda realidad, piensan ellos.
No quieren perder ni a las chapas y su nariz debe ir siempre por delante de la de los demás cuando hay que salir a correr. La máxima regla ciclista de que “ir a rueda por momentos alivia el sufrimiento y corta el viento” no se escribió para ellos, capitanes del grupo y amantes de dar la cara a poco que el nivel del terreno se endurezca. Ya sea bajando o subiendo, siempre encontrarán motivos para un inesperado cambio de ritmo que rompa la concordia.
Algunos compañeros de entrenamiento sufren al pataliebre en cada rodaje, pues todo puede volverse competición sin dorsales en cuanto se descuidan. Dejan que se aleje unos metros, que resultan multiplicarse por hectómetros al poco rato, y si lo avistan más tarde, bufando entre los pinos, lo huyen como al diablo pues su ritmo es infernal.
Los pataliebres son generosos en el esfuerzo y mantienen la cadencia de su zancada, que sólo cambiarán a mejor si avistan a alguna víctima propiciatoria que corra flojo o a otro como ellos que haya caído en la pájara.
Adelantan a cansados ciclistas en los toboganes de la tapia del bosque alto, y aún les queda fuerza para repartir inoportunas palabras de ánimo, dejando al superado en plena rampa con cara de tontaco. Quizá el pataliebre se merezca un escarmiento.

correr solo o acompañado

Se trata de dos modalidades que tienen sus ventajas y sus inconvenientes, y practicar una u otra depende mucho de nuestras circunstancias y objetivos personales. En cualquier caso, son dos formas de correr que no son excluyentes, y podemos alternarlas en busca de los aspectos positivos de una y otra.
Eva María González Esteban, miembro de Saluspot y psicóloga de Psicólogos Zaragoza EGE, ha analizado los pros y los contras de cada modalidad.

Ventajas del running en solitario
Autosuperación: me supero a mi mismo, gestiono el tiempo de mi entrenamiento, el lugar, la hora, los kilómetros, qué hacer en un momento de cansancio (lo dejo o sigo superándome y aceptando nuevos retos y desafíos).
Confianza en mí mismo y percepción de logro, al marcarme mis propios objetivos. Confío en mi programación, mis metas y en superar las dificultades que aparezcan. Así aumenta la percepción de logro. ¡Puedo hacerlo!.
Aumenta la sensación de control al gestionarme yo mismo en una actividad. Esa sensación de control puede extenderse a otras facetas de la vida. Me proporciona energía y estímulo.
Práctica consciente de lo que hago: centro la atención en mí, en mis sensaciones físicas, mis pensamientos, cómo me siento. Me aporta sensaciones de plenitud, bienestar y de atención consciente a lo que hago. Y terminar el entrenamiento con unos ejercicios de respiración (absolutamente recomendado) mejora la recuperación física y mental.
Tranquilidad y relajación: es mi momento, me evado del estrés cotidiano y me centro en una actividad que me genera sensaciones de confort y relax.

Inconvenientes del running en solitario
El más importante es no recibir refuerzo positivo por parte de los compañeros de entrenamiento, siendo por tanto necesaria una motivación intrínseca.

Ventajas de correr acompañado
La motivación llega a través del grupo, sobre todo si estoy empezando a correr y considero esta tarea complicada. Otros corredores con mayor motivación y experiencia me van a animar a seguir entrenando.
Correr se hace más llevadero y divertido, me distraigo hablando con los compañeros y ellos me pueden ayudar a afrontar y superar las dificultades que vayan surgiendo.
Conocer gente con una misma afición y con los que podemos compartir la experiencia de correr y disfrutarla aún más en compañía.
Prevención de lesiones gracias al apoyo social y a la ayuda de los corredores más experimentados, que me pueden informar sobre cómo evitar conductas de riesgo.

Inconvenientes de correr en compañía
El principal es seguir entrenando por compromiso con los demás y no por compromiso con la actividad de correr.

VIII MEDIA MARATÓN VILLA DE LA RODA

Una nueva edición de la Media maraton Villa de La Roda, y una vez más los Cinguanes se calzan las zapatillas, se visten con sus mejores galas y emprenden rumbo hacia una nueva gesta. Antonio, Jesús, Paco, Edu, Fátima, Lucía, J Enrique y los acogidos Patxi y Foncho componían el elenco de actores que darían cuenta de tan magistral obra de la distancia preferida por este club.

Tarde rara, desapacible en un principio, con lluvia amenazante que hizo acto de presencia a pocos minutos de la salida, pero que se fue entonando con el paso de los minutos y los kilómetros hasta recibir los tan deseados raytos de sol en nuestros sudados rostros.

Una muesca más en al culata, tra más al zurrón.

Cada Chinguan con un objetivo diferente, cada uno según sus fuerzas, fuimos zancada a zancada buscando el horizonte de nuestro reto.

La Roda es una carrera cómoda, sin gran desnivel, y rápida. Las marcas suelen ser mejores en la tierra de "los Miguelitos". será por la recompensa en forma de dulce relleno de crema que espera tras la meta o tal vez por las ganas que tenemos de superarnos carrera tras carrera.

El circuito ya va rodando con el paso de las semanas y se encuentra superado el primer tercio. En breve comenzarán las medias maratoens tan típicas de primavera, con Almansa y Albacete como máximo exponente. Allí estaremos los Chinguaners, como siempre, dándolo todo.